El espacio entre Cielo y Tierra parece un fuelle: Vacío, pero no se agota. Mientras más se mueve, más da de él Mientras más conocemos, más pobres somos. Mejor es mantener el centro, Conservar el vacío interior. -Tao Te Ching Verso 5- traducción de Iñaki Preciado -
¿Cuántas veces habremos de ir más allá de lo conseguido en el mundo exterior? Más allá de la fama, más allá del éxito, más allá de los afectos, más allá del ser reconocidos… El reencontrarse, el entrar al interior, a veces parece un desierto… En el juego de reflejos ilusorios, parece perderse algo… El universo latente de pronto te despoja de todo… Esta animación es solo un pretexto; bien realizada nos habla de la inspiración que surge del estado de vacío y de unión con lo intangible.
Si has olvidado tu corazón, si sientes una cierta presión en el estómago o en el centro del pecho… ¿Adónde te habrás ido? En el momento de soltar todo llegas al punto donde parece no haber retorno. Ahí entra en juego el universo y se pone en evidencia la unidad silenciosa de la fuente primordial que, ajena de sí, teje la eternidad con hilos invisibles…